viernes, 18 de noviembre de 2016

Una inovación revolucionaria

En el vídeo abajo podéis discubrir una inovación increíble.

¿Lográis adviniar de qué objeto se trata? ¡Mucho éxito! 








1,5 horas

jueves, 17 de noviembre de 2016

Mi cuento favorito vídeo

Aquí os presento mi primer vídeo casero que he subido en mi blog. Es el cuento del Häwelmann. Espero que os guste. 








2 horas

Mi cuento favorito

De antemano, quiero decir que luego voy a cargar un vídeo. En este vídeo voy a contar el cuento del Häwelmann, pero en otras palabras. Lo hice porque quería practicar hablar más libre y otra razón era que el cuento del Häwelmann me ha gustado desde siempre. Adjunto la primera versión.

Introducción:

De niño, cada dos o tres días y antes de acostarme, mi madre solía leerme un breve cuento o una historia mínima. Uno de mis favoritos fue un cuento menos conocido: der kleine Häwelmann, una historia sobre las aventuras de un niño. Fue escrita por Theodor Storm.

Häwelmann es, originalmente, una vieja palabra alemana. Es un niño que necesita mucha atención y que no da tregua. Cuando era un niño quería escuchar este cuento una y otra vez. No sé porque me gustó tanto. A lo mejor, porque Häwelmann encuentra, durante todo el cuento, a animales y estrellas que saben hablar. Así se desarrollan conversaciones muy divertidas, pero, asimismo, muy profundas.    

En todo caso, ahora voy a  intentar contar el cuento como mi madre solía hacerlo.

Cuento:
Èrase una vez un niño que se llamaba Häwelmann. Por la tarde, cuando estaba cansado, y por la noche dormía en una cama que tenía ruedas en lugar de patas. Si el Häwelmann, en cambio, no estaba cansado su madre tenía que darle vueltas con la cama y él nunca quería que ella parara de darle vueltas.

Una noche el pequeño Häwelmann estaba en su camita de niño con las ruedas, pero no podía dormirse. Su madre ya estaba a punto de dormirse en su propia cama al lado de la cama de Häwelmann, que, de repente, gritó: " ¡Mamá, quiero que me des una vuelta!", y la madre le dio una vuelta. Cuando el brazo de la madre estaba a punto de dormirse, le dio una vuelta con otro brazo. Al final, la madre se durmió y el pequeño Häwelmann gritó: " ¡Más, más!", pero su madre ya no lo oyó. Häwelmann continuó gritando y no duró mucho hasta que la luna asomó por la ventana del cuarto del Häwelmann. Y lo que vió la luna allì dentro no lo había visto nunca antes. 




El pequeño Häwelmann se había quitado su camisón y se lo había atado al dedo gordo de su pie de tal manera que parecía que fuese la vela de un barco. A continuación, agarró los dos extremos de la camisón y comenzó a soplar. Empezó a moverse y rodaba por el suelo, por lo alto de la pared; y luego de cabeza boca abajo por el techo, para al final, volver a rodar por el suelo. Se dio tres vueltas más y entonces, de repente, la luna lo miró a los ojos. "Chico, no has tenido suficiente?", preguntó.

"¡No! ¡más, más! ¡Abre la puerta! Quiero conducir por la calle, por la ciudad. Quiero que todo el mundo me vea conduciendo", gritó el pequeño Häwelmann.

"No puedo hacer esto.", replicó la luna; pero dejó caer por la ventana un rayo de su luz sobre el cuál el pequeño Häwelmann abandonó la casa.  

La calle estaba vacía y no se podía oír ningun ruido. Las casas altas estaban iluminadas por la luz de la luna, pero no había gente. Cuando pasaba por las calles, la luna alumbraba al niño; sin ver a nadie más.


Cuando pasaron por el gran gallo de oro, este empezó a cantar. " ¿Qué estás haciendo?", preguntó Häwelmann.

"Canto por la primera vez", replicó el gallo.

"¿Dónde está toda la gente?, gritó Häwelmann.

"Duermen", replicó el gallo " cuando canto por la terera vez, se despierta el primero   hombre".

"¡No! Tarda demasiado tiempo. Quiero ir al bosque. ¡Quiero que todos los animales me vean!", ordenó el pequeño Häwelmann.

"¿Chico, aún no es suficiente?", decía la buena y anciana luna.

"¡No! ¡Más, más!  ¡Brilla, luna, brilla!", gritó el pequeño Häwelmann. Después siguió soplando la vela mientras la luna le brillaba el camino. 



Tampoco en el bosque había nadie, aparte de un gato.
Häwelmann preguntó al gato: " ¿Dónde están todos los animales?"
"Duermen", replicó el gato.
"¿Todavía no estás contento?", preguntó la luna.
"¡No, no,!", replicó el pequeño Häwelmann.
"¡Más, más! ¡Brilla, luna vieja, brilla!", gritó Häwelmann.


Sopló en su vela, abandonó el bosque y fue al cielo.
Aquí sí le gusta estar al Häwelmann.
Todas las estrellas estaban despiertas y brillaban así que todo el cielo resplandecía.
"¡Apártaos!", gritó Häwelmann; y asustó a todas las estrellas de modo que se cayeron del cielo.
"¿Ha sido esto suficiente?", preguntó la luna.
"¡No, no!", respondió el pequeño Häwelmann y pasó por la nariz de la luna.

"¡Vergüenza!", maldecía la luna y acto seguido apagó su lámpara y todas las estrellas apagaron sus lámparas también. El pequeño Häwelmann tenía miedo.
Por fin, descubrió una cara roja al horizonte. Häwelmann creyó que era la luna y gritò:"¡Brilla, luna, brilla!", pero no era la luna sino el sol.

El sol le preguntó:"¿Qué estás haciendo en mi cielo?", y cogió al Häwelmann y lo tiró al mar.

"¿Y luego? , ¿Ya no te acuerdas?" 

Si yo y tú no hubiésemos salvado al Häwelmann con nuestra barca, se habría, por las buenas o por las malas, ahogado.





2 horas























jueves, 10 de noviembre de 2016

Volapük - una lengua artificial de Costanza

Dado que en la  sesión pasada de clase hablamos sobre lenguas y también sobre la lengua artificial Esperanto, me acordé de que durante mis años escolares di una conferencia sobre otra lengua artificial que no es tan conocida como el Esperanto: el Volapük.

El Volapük fue creado en Costanza por el sacerdote Johann Martin Schleyer en el año 1880. 
placa conmemorativa en Litzelstetten


Además, el Volapük fue la segunda lengua artificial después del Solresol, otra lengua artificial, pero no se hablaba Solresol; es decir, el Volapük fue la primera lengua artificial que se llegò a usar realmente.
Al principio, Schleyer intentó crear una mezcla de seis lenguas (aleman, ingles, frances, italiano y español); pero, ya que el modo de escritura habría sido unitario, creó un "alfabeto del mundo".  
La primera frase publicada por Schleyer fue la siguiente:

                                   Ko God Beginobsöd dinis valik!

Lamentablemente, no pude encontrar la traducción de esta frase. Quizá vosotros lo logréis.

En el año 1880 fue publicada la primera gramática y la lengua artificial recibió el nombre actual: Volapük.

El nombre "Volapük" es creado por las palabras inglesas world y speak, entonces "mundo" y "hablar" en español. En otras palabras "lengua del mundo".
El eslogan del Volapük fue: 

Menad(e) bal - Pük(i) bal!

               
 Esta frase significa: "una humanidad  - una lengua"; y en los primeros años parecía que iban a lograrlo.      
         
Eso es lo que más me sorprendió del Volapük: su éxito.  Según los datos entre 1 y 2 millones de personas, incluso en China y Japón, habrían hablado el Volapük en el año 1888.


placa conmemorativa delante de la casa natal de Schleyer en la Schottenstraße


Asimismo, había en este año aproximadamente 1000 enseñantes y  50 profesores con una posición más alta, que enseñaron la lengua.
Lamentablemente, el Volapük desapareció muy rápido solo pocos años después a causa del alto grado de dificultad y por la aparición de una nueva lengua artificial: el Esperanto.

Hoy en día los hablantes del Volapük son pocos; y solo las placas conmemorativas rememoran una lengua que tuvo más de un millión de hablantes y que se habló incluso en China.

Si os apetece saber más sobre esta lengua perdida, particularmente sobre la gramática, os dejo algunos enlaces.

https://de.wikipedia.org/wiki/Volap%C3%BCk
https://es.wikipedia.org/wiki/Volap%C3%BCk

(2,5 horas)


Las emociones del mundo: la "morriña"

En la sesión de clase del pasado miercoles hablamos sobre las emociones y los sentimientos. Saltamos el segundo ejercicio que voy a hacer ahora en casa. 
El objetivo del ejercicio es descubrir el significado de la "morriña", una palabra de origen gallego, con ayuda de dos fragmentos. 

Los fragmentos son: 1. El goleador gallego del Glasgow Rangers, Nacho Novo, podría                                          regresar en breve a Galicia para jugar en uno de los dos clubes                                          de Primera División de la comunidad. Al parecer, existe una                                              oferta en firme y es posible que el ferrolano la estudie con                                                  detenimiento. La morriña es la morriña.

                                   2. Cuando el periodista le pregunta si no siete cierta nostalgia, la                                          misma que definía Castelao hablando de los emigrantes                                                      gallegos, deja escapar una risita. "La morriña la tenemos                                                  todos", afirma. La morriña es la esencia que nos define, la                                                segunda piel que se nos pega cuando ya lo hemos perdido todo.


Derivado de estos dos textos, supongo que la "morriña" es un sentimiento muy fuerte. A lo mejor, unos de los más fuertes que hay.

Cuando uno sufre de "morriña" significa que echa de menos, con toda su alma, su hogar, su familia, sus amigos, la comida o lo que sea. Quizas echa de menos también la seguridad que le ofrece su lugar de origen.  La "morriña" ´puede tener un buen número de razones. 

En aleman hay una palabra similar: Heimweh; que significa literalmente dolor de hogar. En aleman hay otra palabra que es muy cerca vinculada a Heimweh; es la palabra: Geborgenheit. Es lo que quería expresar con la susodicha palabra "seguridad". Significa que uno se siente muy seguro, por un lado, pero, por otro lado, implica también algo más muy difícil de expresar; pero en mi opinión falta algo importante, quizá una forma básica de alegría.

Además, existe en aleman una palabra para expresar lo contrario de Heimweh

Fernweh. Uno sufre de Fernweh cuando echa de menos un lugar que no es su hogar. Este lugar puede ser un lugar en el extranjero donde uno pasó sus vacaciones y entonces echa de menos ese tiempo sin preocupaciones o sean las personas que uno conoció en ese lugar. Asimismo, hay otros muchos motivos diferentes para sentir Fernweh.

(1,5 horas)